El Estudio
No puedo decir qué llegó antes… la herencia o la vocación… ambas cosas están en mí desde que recuerdo.
La herencia… es mi abuelo… en los cubos de madera que me cortaba en su taller y que amontonaba con mi hermano haciendo mis primeras maquetas.
La vocación… cuando robaba las herramientas en las obras de mi padre y trataba de copiar todo lo que hacían; en darme cuenta que mis olores favoritos tienen que ver con esto… el hormigón fresco en un día de lluvia y el de la madera recién cortada.
A los once años me inicié en la pintura y a los doce estaba restaurando mueble y haciendo cursos de dorado a la hoja y pátinas.
En mi familia siempre estuvo presente la construcción. Mi abuelo trabajaba en esto antes de emigrar y continuó haciéndolo una vez aquí. Mi tío y mi tía son arquitectos y mi padre, quien me encaminó en esta profesión es, al igual que mi hermano, maestro mayor de obras.
Mi introducción en la dirección de obras fue justamente de la mano de mi padre, a los 20 años, en una de las tantas casas que construyó en zona norte, mientras estudiaba la carrera de arquitectura en la FADU (UBA) de la cual me egresé.
Más tarde y después de haber trabajado tres años a su lado, inicié mi camino en el barrio Santa Bárbara con parte de los empleados que trabajaron para él durante mucho tiempo, varios de ellos llevan hoy veinte años trabajando con la familia.
La arquitectura debe adecuarse a cada persona y su familia; debe agregar espacios y situaciones sin imponerlas. Nuestro trabajo en MacProjects consiste en descubrir esas aspiraciones para generar arquitectura sin abandonar su funcionalidad.
En el año 2012 decidimos emprender una nueva etapa junto a mi marido Emmanuel,con quien expandimos los horizontes del diseño logrando encontrar una voz propia.Hoy, luego de 34 casas construidas y numerosos proyectos seguimos intentando crecer perfeccionandonos día a día.
